Muy interesante el reciente artículo de Sean Buckley en Engadget, abajo dejo el enlace, sobre el más que incierto futuro de la tinta electrónica en color. Junto a la iluminación, algo que los usuarios pedían insistentemente y que nos parecía hasta hace bien poco, la evolución natural a las primeras pantallas monocromo de tinta electrónica, que por lo demás seguían ofreciendo en comparación con las pantallas LCD de tabletas y smartphones una mejor experiencia de lectura, una duración mayor de batería y, al menos en ese momento, un precio inferior.
En la guerra comercial entre Amazon, Sony, B&N y Nook de los años 2009 y 2010 el lector de tinta electrónica en color podría haber sido el arma definitiva. Son de esos años los primeros prototipos de Triton y Mirasol. No hace mucho aquí mismo comentábamos las posibilidades que la compra de liquavista por parte de Amazon parecía sugerir. Posibilidades que por el momento no solo no se han materializado sino que parecen alejarse definitivamente.
El LCD mató el lector de tinta electrónica en color.
Algo de lo que casi no quedan dudas si pensamos en los últimos productos que ha presentado Amazon: El nuevo Kindle Paperwhite con pantalla carta y las dos nuevas tabletas Kindle Fire HDX. El primero es descendiente del primer lector de Amazon en el lejano 2007, eso sí, con lo mejor que la tecnología actual puede ofrecer. Los segundos siguen el camino abierto por el iPad: lectores de libros, pero también de revistas, de comics, de películas, música y apps. Lo que ha quedado fuera es el camino de enmedio. Los motivos son:- La experiencia de lectura de la tinta electrónica en color no ha alcanzado el nivel de calidad de la tinta monocromo ni la capacidad de producción a escala de ésta. Algo que Jeff Bezos ya afirmaba en 2010.
- Los lectores de tinta electrónica en color, prácticamente conocidos únicamente por los interesados en el tema pero no por el gran público, tenían además un precio, tomemos por ejemplo Hanvon con pantalla Triton, 530$ al cambio, que les situaba desde su lanzamiento directamente fuera del mercado.
- La fecha de lanzamiento de lector de tinta electrónica en color seguía alejándose mientras que el precio de los tablets seguía bajando. Amazon presentaba su tableta Kindle Fire en Septiembre de 2011 y no mucho después Google hacía lo mismo con su primer Nexus 7, ambos con un precio de salida cercano o inferior a los 199$, muy por debajo de cualquier lector de tinta electrónica en color del momento, por ejemplo los 300$ del prácticamente desconocido, Kyobo con pantalla Mirasol.
- El hecho de que estas primeras tabletas y smartphones se usaran también como lectores de ebooks, no ha hecho más que agravar la situación de los desarrolladores y fabricantes de tecnología de tinta electrónica en color, que únicamente declaran prácticamente pérdidas.
El futuro de la tinta electrónica monocromo.
Aunque parece claro que el lector de ebooks dedicado va a seguir teniendo su mercado, al menos eso parecen confirmar tanto el Paperwhite, como el Kobo Aura HD, éste es cada vez es más reducido, y no únicamente por las limitaciones de la tinta electrónica para mostrar contenido diferente del texto, por mucho que este tipo de pantallas haya mejorado en estos años; sino por la capacidad de las pantallas LCD de ofrecer más funciones que la lectura de libros, a un precio cada vez más similar. Parece que la conveniencia se impone a la calidad.
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