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Revolución digital

Biblioteca Pública Iván de Vargas
Imagen de David Pallol - Madrid Tipográfico
En estos días he leído un par de artículos sobre la primera biblioteca pública sin libros en San Antonio, Texas. Entiendo que muchas veces este tipo de noticias tienen más de publicidad que de noticia, de hecho la primera biblioteca enteramente digital, el Proyecto Gutenberg, se fundó en 1971, muchísimos años antes de la llegada de cualquier dispositivo portátil de lectura. Recuerdo perfectamente estar viendo en la pantalla de un pc los textos de David Hume en formato texto plano, allá por el año 2001.

¿Bibliotecas con ebooks?


Como ya he comentado anteriormente, las bibliotecas viven un momento muy difícil debido al cambio digital y también a la actual situación económica. Lo que no creo que llegue a ocurrir es que desaparezcan totalmente.  El ejemplo más gráfico, que sigo usando cuando me preguntan por el tema, es el de las velas, las bombillas las desplazaron como fuente de iluminación, pero están lejos de desaparecer porque aportan una experiencia a los sentidos que ninguna bombilla que hayamos conocido hasta ahora no puede ofrecer. Eso y que no dependen de una fuente de energía externa.

Es posible sin embargo que algunas bibliotecas se queden con las estanterías vacías o cierren, como lamentablemente les está pasando a muchas librerías, no únicamente en España y de nuevo debido a una serie de factores económicos, seguro, pero también de transición hacia un nuevo modelo de distribución y consumo cultural digital.

Cuando hablo de revolución digital no me refiero únicamente al dispositivo, ya sea un Palm, un smartphone, un eReader o un tablet. Por eso he querido dejar bien claro más arriba que el libro electrónico es muy anterior al dispositivo. Evidentemente cuando kindle (el ecosistema, no el dispositivo) sale al mercado a finales de 2007 permite que el libro electrónico esté al alcance de un gran número de personas no necesariamente entusiastas de la tecnología y eso que no tenía un precio muy accesible. Ahora se pueden conseguir lectores de dudosa calidad juntando cupones de un periódico.

¿Revolución tecnológica o cultural?


La verdadera revolución es la de poder acceder a un contenido en formato digital desde prácticamente cualquier parte del mundo con acceso a internet. Además de Gutenberg, Wikipedia sería un buen ejemplo, como también lo es "Cincuenta sombras de Grey" un título que empezó publicado por episodios en páginas web de fans de la serie Crepúsculo, luego pasó a formato digital y de impresión bajo demanda antes de estar en pilas de cien en cualquier librería del planeta.

¿Desaparecerá el libro en papel? Creo que no, ¿cerrarán todas las librerías y bibliotecas? seguramente tampoco, aunque muchas sí. ¿Pasarán de moda los dispositivos de lectura? Quizá en unos años podamos llevar un proyector de hologramas en el bolsillo que sustituya la pantalla actual, lo que sí está claro es que lo que leamos será en formato digital.

Artículo escrito en la biblioteca pública Iván de Vargas de Madrid.

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